En el mundo de las finanzas personales, es común encontrarse con situaciones en las que necesitamos tomar medidas sobre nuestras tarjetas bancarias. Dos de las acciones más frecuentes son apagar una tarjeta y anularla. Aunque pueden parecer similares, tienen diferencias significativas que es importante conocer para tomar la decisión correcta en cada caso.
Comencemos por ver qué significa cada concepto:
- Apagar una tarjeta: Esta acción implica desactivar temporalmente la tarjeta, impidiendo su uso hasta que se vuelva a activar. Es útil en situaciones en las que no estamos seguros de si hemos perdido la tarjeta o si ha sido robada.
- Anular una tarjeta: Esta acción conlleva cancelar la tarjeta de manera definitiva, impidiendo cualquier uso futuro. Es necesaria en casos de robo, pérdida definitiva o cuando ya no necesitamos la tarjeta.
Cómo apagar una tarjeta
Para apagar una tarjeta, se puede hacer normalmente a través de dos vías: llamar al teléfono específico de robo o extravío de tu tarjeta de tu banco y pedirlo o, apagar la tarjeta tú mismo utilizando los servicios de banca digital o la app de tu entidad financiera. Esta última vía, además de ser un proceso sencillo y rápido, permite apagar la tarjeta temporalmente hasta que decidas activarla nuevamente.
Pasos:
- Acceder a la sección de tarjetas en la app o Banca Digital.
- Seleccionar la tarjeta que se desea apagar.
- Confirmar la desactivación temporal.
Cómo anular una tarjeta
Anular una tarjeta requiere procesos diferenciados según sea el motivo de anulación: anulación por robo o por motivos personales. Si quieres anular tu tarjeta porque has confirmado que la has perdido o te la han robado, puedes hacerlo también a través de tu banca digital.
Pasos:
- Acceder a la sección de tarjetas en la app o Banca Digital.
- Seleccionar la opción de anulación y pedir duplicado.
- Confirmar la anulación y seleccionar el método de envío de la nueva tarjeta (a tu oficina bancaria o a tu domicilio).
Si la anulas a través de tu banca digital, requiere habitualmente que pidas un duplicado, pues se entiende que deseas bloquear esa tarjeta por robo o extravío pero que quieres seguir teniendo una tarjeta.
Si deseas anular la tarjeta por motivos personales y no tener más esa tarjeta con tu banco, requiere seguir un procedimiento específico para garantizar que la cancelación sea efectiva y no se generen intereses ni comisiones adicionales. En estos casos, lo mejor es que acudas a tu oficina bancaria o que llames al servicio de atención telefónica de tu banco.
Consecuencias de apagar una tarjeta y de anularla
- Apagar una tarjeta: La tarjeta queda desactivada temporalmente, impidiendo su uso hasta que se reactive, pero en cuanto se vuelve a activar puedes usarla de nuevo inmediatamente.
- Anular una tarjeta: Si has pedido una anulación, la tarjeta queda cancelada de manera definitiva, impidiendo cualquier uso futuro. Si has pedido que te envíen un duplicado, debes esperar a recibir el duplicado y activar la nueva tarjeta recibida para poder usarla.
Desde que anulas una tarjeta y pides un duplicado hasta que la recibes pueden pasar unos 3 días, así que tenlo en cuenta y pide anular la tarjeta solo en caso confirmado de robo o pérdida definitiva y, si no estás seguro, entonces mejor opta primero por “apagar” tu tarjeta.
Qué hacer en caso de robo o pérdida de una tarjeta bancaria
En caso de robo o pérdida de una tarjeta bancaria, es fundamental actuar rápidamente para minimizar los riesgos. Lo primero que se debe hacer es bloquear o anular la tarjeta para evitar su uso indebido. Y si no estás seguro de que te la hayan robado o de que se te ha perdido definitivamente, al menos, opta por apagar la tarjeta temporalmente, como hemos indicado anteriormente.
Recuerda que, ya sea anular o apagar la tarjeta, las entidades financieras ofrecen hacerlo a través de su web o app móvil y también llamando al número de teléfono específico de tarjetas. Si estás en horario de apertura de oficinas, también te puedes acercar a tu oficina bancaria para pedir el bloqueo de la tarjeta.
Además, es importante reportar la pérdida o robo a la entidad emisora de la tarjeta lo más pronto posible e, incluso, presentar denuncia en la policía.
Cómo proteger tus tarjetas bancarias de fraudes y robos
Proteger tus tarjetas bancarias de fraudes y robos requiere una combinación de buenas prácticas y precauciones personales. Algunas recomendaciones incluyen:
- Utiliza contraseñas seguras y la autenticación biométrica para proteger tus cuentas bancarias
- No compartas nunca tus claves de banca digital ni el pin de tu tarjeta
- Activa las notificaciones bancarias para estar al tanto de cualquier actividad realizada con tu tarjeta
- Utiliza tarjetas virtuales o tarjetas prepago para compras online, sobre todo en sitios en los que no sueles comprar habitualmente
Conocer las diferencias entre apagar y anular una tarjeta bancaria es esencial para tomar decisiones informadas en situaciones de robo, pérdida o cuando ya no necesitamos la tarjeta. Además, es importante saber qué hacer en caso de robo o pérdida de una tarjeta, y cómo protegerlas de fraudes y robos. Y si tienes banca digital, comprueba donde tienes la opción de apagar tu tarjeta o anularla para, en caso de necesidad por robo o pérdida, poder hacerlo cuanto antes y proteger tus finanzas personales.