Enseñar a nuestros hijos a ahorrar desde la infancia es fundamental para su futuro económico, pero también es una excelente manera de que conozcan el valor del dinero y ayudarles a gestionar sus finanzas personales a largo plazo. Por todo ello, es importante inculcar desde edades tempranas la importancia de tener hábitos de ahorro y no malgastar sus recursos para poder afrontar posibles imprevistos económicos.
Aprender estos principios siendo jóvenes les ayudará en su vida de adultos, tal y como apuntan organizaciones internacionales, como la OCDE y Unicef, con estudios y publicaciones que señalan la importancia de promover el desarrollo de aptitudes en la gestión financiera desde la infancia.
Educación y capacidad financiera desde niños
La educación financiera es una herramienta básica para inculcar a los hijos la importancia del ahorro y tener un control de su economía, convirtiéndose en personas más conscientes desde el punto de vista social y económico. Además, la capacidad financiera les ayuda a ser más inteligentes con el dinero y con los recursos. Para ello, dentro del ámbito doméstico se pueden utilizar algunas técnicas muy fáciles de aplicar, para que los menores aprendan a administrar correctamente sus finanzas:
- Demostrarlo con acciones prácticas: Para que los niños se den cuenta de que el ahorro no es sólo un concepto teórico, es importante ayudar a entenderlo con actividades que les resulten cercanas y fácilmente comprensibles. Por ejemplo, haciendo pequeños problemas o incluso con juegos de mesa en los que se utiliza dinero, como el clásico Monopoly.
- Tener un objetivo para el ahorro: Plantear un reto con el que motivar al niño a alcanzar su meta de comprar lo que tenga en mente, intentando diferenciar entre gastos necesarios y caprichos. Esta práctica sencilla, pero al mismo tiempo muy efectiva, puede realizarse en un sitio físico, con las tradicionales huchas, o en un sitio virtual, como una cuenta de ahorro para niños.
- Gestionar su propio dinero: Asignando una pequeña paga periódica a los hijos (nunca más del debido), o recompensándoles por la realización de buenas acciones, se consigue que tengan un presupuesto propio y sientan la obligación de administrarlo. Además, de esta manera se les muestra el valor del dinero, el esfuerzo que cuesta ganarlo y cómo utilizarlo de forma responsable.
- Dar ejemplo en casa: El niño suele reproducir los comportamientos que observa en el hogar. Por ello, si se les involucra en la economía familiar y se predica con el ejemplo, los niños verán el ahorro como algo habitual y se les enseñará a tener un consumo responsable y a no gastar más de lo que se tiene.
Bancarización de los menores
Este interés de los padres por el ahorro en los niños debe verse también como una vía para formar a actuales y futuros usuarios de servicios bancarios y productos financieros, que deben ser capaces de resolver problemas de economía doméstica y tomar decisiones sobre el gasto cotidiano.
Hay que tener en consideración que, según el ciclo de vida financiera, cuando esos menores alcancen la mayoría de edad, su cuenta de ahorro infantil pasará a ser una cuenta para jóvenes con una operatoria más amplia que requerirá de mejores conocimientos financieros para un uso correcto.
De hecho, según explican desde la European Financial Planning Association (EFPA), el 59% de los jóvenes españoles con una edad que se sitúa sobre los 15 años dispone de una cuenta bancaria. Y son precisamente éstos los que obtienen mejores resultados en materia de educación financiera dentro de las pruebas PISA.
Opciones de ahorro infantil
Existen varias opciones para que los menores guarden su dinero, o para que los padres ahorren de cara al futuro de sus hijos. Algunas de las más interesantes son:
- Planes de ahorro: En los que se realizan aportaciones periódicas que generan intereses y pueden disfrutar ventajas fiscales.
- Cuentas de ahorro para niños: Cuentas corrientes adaptadas a los menores de edad, con ventajas que se detallan a continuación.
Ventajas de las cuentas de ahorros infantiles
Aunque la mejor opción para optimizar nuestros ahorros puede ser una combinación de los productos anteriores, la cuenta de ahorro infantil es el más extendido y el que los padres suelen contratar para sus hijos por ser una forma segura y fácil de ahorrar dinero con interesantes ventajas como:
- Sirven para educar a los niños en el ahorro
- No suelen tener gastos ni comisiones de mantenimiento
- No suelen requerir un importe mínimo de apertura
- Permiten hacer aportaciones pequeñas
- Tienen liquidez total e inmediata
- Suelen ofrecer remuneración con regalos o promociones
Y tú, ¿te animas a enseñar a tus hijos las ventajas del ahorro infantil?