La economista británica Mary Paley Marshall (Lincolnshire, 1850-Cambridge, 1944) fue una de las primeras mujeres en examinarse para acceder a la universidad, llegando a estudiar en el Newnham College, perteneciente a Cambridge. Además, contribuyó a la profesionalización de la economía y elaboró, junto a su marido, Alfred Marshall, el manual ‘The economics of industry’ (‘La economía de la industria’), muy valorado por diversos economistas de la época. En suma, fue una precursora en el ámbito académico, laboral y social para las generaciones futuras de mujeres.
Mary Paley vivió en una época – de plena evolución del análisis neoclásico– y en un lugar –Inglaterra– más que significativos en el marco del desarrollo de la economía, puesto que fue entonces cuando esta empezó a ser considerada una ciencia y también cuando comenzaron a darse los pasos para su profesionalización.
Existen muchas voces que opinan que Mary Paley Marshall trabajó a la sombra de su marido, considerado, sin duda, uno de los mejores economistas de su época. Lamentablemente, este hecho pudo contribuir quizá a que su labor pasara más desapercibida.
De hecho, como prueba de que Alfred Marshall (1842-1924) ensombreció la carrera de Mary Paley, hay quien menciona que, al reeditar en 1892 el manual ‘The economics of industry’, un éxito de ventas en su momento, fue el propio economista quien eliminó el nombre de su esposa de la portada, aduciendo, sin embargo, que esa edición había sido revisada y tenía características muy diferentes de la inicial de 1879.
También hay quien considera que Mary Paley pudo participar activamente en la elaboración de la obra ‘Principles of economics’ (‘Principios de economía’), publicada por Alfred Marshall en 1890 y que durante muchos años fue la principal referencia de economía de todo el mundo. Sin embargo, no hay documentos concretos que confirmen este punto. En general, se desconoce cuál fue la parte que pudo desempeñar en la producción de los libros de su marido.
Quizá, por ello, Mary Paley sigue siendo una desconocida para una gran parte de la población. En cualquier caso, también son muchos los que hoy en día defienden que la británica debe estar entre las mujeres más significativas del pensamiento económico de los últimos dos siglos.
Hija de un reverendo, rector de Ufford, y bisnieta del filósofo y teólogo utilitarista británico William Paley, Mary creció en una rectoría rural y fue educada en casa. En 1871 fue becada e ingresó, con una de las mejores calificaciones, como una de las cinco primeras alumnas del recién fundado Newnham College, perteneciente a la Universidad de Cambridge.
No obstante, el ser mujer no se le permitió graduarse y el único reconocimiento a su esfuerzo que recibió fue una carta confidencial de sus examinadores. En cualquier caso, el solo hecho de hacer esa prueba siendo mujer ya fue un hito en la época.
Profesora de Economía en Cambridge
Mary Paley, alumna de Alfred Marshall, comenzó en 1875 su labor docente para ayudar en la formación de aquellas jóvenes que empezaban a acudir al que sería el primer colegio femenino importante de la Universidad de Cambridge, el Newnham College. Así, llegó a ser la primera profesora adjunta a la cátedra de Economía en la institución académica inglesa.
Después de su matrimonio en 1877 con Marshall, Mary Paley se dedicó a su esposo, centrándose más en ayudarlo en sus investigaciones que en desarrollar sus propias teorías. No obstante, sí continuó enseñando en el Newnham College y en Girton, otro de los colegios universitarios para mujeres de Cambridge.
Aunque, inicialmente, Alfred Marshall era partidario de la educación superior para mujeres, con el paso de los años tuvo un cambio sustancial de postura, llegando a escribir cartas en contra de una universidad mixta. Más aún, en 1897 apoyó la ley universitaria que impedía que las mujeres obtuvieran un título de Cambridge.
Pese a ello, Mary Paley Marshall defendió siempre el papel de las mujeres en la sociedad y se mantuvo firme en sus convicciones progresistas acerca de los derechos de estas, especialmente en lo referido a la educación y al sufragio. Es posible que este hecho afectara a la relación personal con su marido, pero ella nunca mostró públicamente ese posible desacuerdo.
Como prueba de ese papel activo de la mujer en la sociedad que defendía Mary Paley, destaca el hecho de que formara parte de algunas sociedades y organizaciones femeninas y de caridad de Cambridge. Por ejemplo, fue una de las primeras once integrantes de la conocida como Ladies Dining Society (Sociedad de Cenas para Damas).
De igual modo, como colaboradora de su marido, ayudó a la creación en 1890 de la British Economic Association, pieza clave en el proceso de profesionalización de la economía y que en 1902 pasó a denominarse definitivamente Royal Economic Society.
Atención sin distinción en la Marshall Library
Tras la muerte de su marido en 1924, Mary Paley, con 74 años, siguió en su lucha a favor de las oportunidades educativas para las mujeres hasta los niveles más altos posibles, y lo hizo como bibliotecaria honoraria de la Marshall Library de Cambridge. Se trata de una biblioteca de economía a la que donó la colección de artículos y libros de su marido y a través de la cual atendió a estudiantes, sin distinción de sexo, y con la que modernizó las relaciones universitarias entre profesores y alumnos.
Mary Paley Marshall murió a los 93 años y sus recuerdos se publicaron de manera póstuma en 1947 en una obra titulada ‘What I remember’ (‘Lo que recuerdo’). Sin duda, aunque puede ser que viviera a la sombra de Alfred Marshall, fue mucho más que la esposa de un gran economista; fue pionera en un mundo de hombres, contribuyendo a la profesionalización de la economía y marcando un hito en la historia de la integración de la mujer en el mundo económico y en la universidad.