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Mejorar la eficiencia energética se ha convertido en una de las principales preocupaciones del sector empresarial. El consumo de energía es uno de los mayores gastos a los que se enfrenta una empresa, aspecto de sobra conocido por todo aquel que gestiona un negocio, desde una gran empresa, hasta el más pequeño comercio.
Además, el alto nivel de consumo energético mundial es uno de los factores que influye en el cambio climático, algo que afecta a todos los países en todos los continentes. Tiene un impacto negativo en la economía y la vida de las personas, las comunidades y los países. En este sentido, forma parte de la responsabilidad social empresarial que se apliquen soluciones viables para contribuir a que los países puedan tener una actividad económica sostenible y más respetuosa con el medio ambiente.
Así, además de ser un acto de responsabilidad social de las empresas, hoy más que nunca, las actuaciones en eficiencia energética son claves para mejorar la competitividad y ahorrar en costes que se traducen en una mejora de la rentabilidad empresarial y, por tanto, en mayor capacidad de inversión en nuevos proyectos y en la generación de empleo.
Sin duda, el Real Decreto 56 / 2016 aprobado por el Consejo de Ministros y la Directiva Europea 2012 / 27 / UE de Eficiencia Energética ha favorecido el impulso de medidas dirigidas a reducir el consumo de energía y las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera. De estas medidas se pueden beneficiar los empresarios, cumpliendo así con dos objetivos ya señalados:
- Ahorrar en consumo de energía y, por tanto, en los gastos de la empresa.
- Mejorar la política de Responsabilidad Social de la empresa, pues el impacto medioambiental de su actividad empresarial se verá considerablemente reducido.
Una empresa más eficiente energéticamente
Hacer más eficiente energéticamente una empresa se puede lograr aplicando distintas actuaciones que varían según sea la actividad de la misma. Sin bien, algunos ámbitos básicos en los que se puede lograr un importante ahorro de energía son los siguientes:
- La iluminación.
- La climatización.
- El agua caliente sanitaria.
- El consumo de equipos y maquinaria.
Hay una cuestión que puede resultar un hándicap para muchas empresas, pymes y comercios: lograr un consumo energético más eficaz y menos costoso requiere de una inversión previa. Si bien, el apoyo financiero específico para fomentar la puesta en marcha y la aplicación de proyectos de eficiencia energética en las empresas es ya una realidad. La mayor concienciación del sector empresarial en la necesidad de ser más eficiente energéticamente, las medidas adoptadas por organismos oficiales y la implicación de entidades financieras han supuesto que las líneas específicas para financiar proyectos de esta tipología puedan ya solicitarse en España.
Línea de financiación ICO-IDAE de eficiencia energética
En concreto, nos referimos a la línea de financiación ICO-IDAE de eficiencia energética, con la que se busca fomentar, mediante la financiación a largo plazo, inversiones productivas de eficiencia energética en los sectores tanto industrial y comercial, como en el sector de la hostelería.
Esta financiación se puede solicitar directamente en las oficinas bancarias de las entidades financieras con las que el ICO-IDAE tiene convenio en vigor, entre ellas, Unicaja Banco. El empresario, comerciante u hostelero presenta su petición en la oficina bancaria, y el banco propone la aprobación de la petición con el aval de IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía) con cargo a los recursos del Fondo Nacional de Eficiencia Energética.
Con el objetivo de financiar los costes necesarios para la reducción del consumo de energía final y de la emisión de dióxido de carbono, será financiable hasta el 100% del coste del proyecto elegido por el IDAE (IVA o impuesto análogo excluido) con máximos de financiación para un mismo proyecto de inversión.
La financiación de estos proyectos se articula mediante un Préstamo Mediación de riesgo compartido al 50% por el IDAE, con las garantías exigidas por el banco, pudiendo estructurarse a tipo fijo o variable en sus dos modalidades:
- Eficiencia Energética en PYME y Gran Empresa del sector industrial y comercial, con financiación máxima de 3 millones de euros hasta 10 años con facilidades de carencia hasta 1 año.
- Plan Renove de ahorro y eficiencia energética en hostelería con hasta 1,5 millones en 5 años con facilidades de carencia hasta 1 año.
Condiciones para la financiación de proyectos
Los proyectos son elegibles a criterio del IDAE, el cual deberá cumplir ciertas condiciones para recibir financiación:
- Para Eficiencia Energética en pyme y en gran empresa del sector industrial y comercial: empresas que tengan la consideración de pyme o de gran empresa del sector industrial y comercial, es decir, autónomos y empresas cuyo CNAE 2009 se encuentre dentro del catálogo publicado en www.idae.es
- En el Plan Renove de ahorro y eficiencia energética en hostelería: personas físicas y jurídicas del sector de la hostelería, entendiendo por tales los autónomos y las empresas cuya actividad principal corresponda con los CNAE 2009 Servicios de alojamiento y Servicios de comidas y bebidas.
Las solicitudes de las operaciones de financiación se tramitarán desde cualquier oficina de tu entidad financiera (si está adscrita), comunicando al IDAE las solicitudes de los clientes, quien en un plazo de 5 días naturales resolverá aprobando o denegando las mismas e indicando el importe máximo de garantía para cada solicitud.
Se consideraran financiables los costes que sean necesarios para conseguir a reducción del consumo de energía, entre otros:
- Los costes preparatorios de la actuación que sean necesarios para presentar la solicitud del préstamo, como pueden ser: dirección facultativa, proyecto y proyectos técnicos, memorias, certificados, etc.
- Los de equipos, materiales e instalaciones auxiliares necesarias.
- Los de transporte, asistencia técnica y para la ejecución del proyecto,
- Los necesarios para la legalización de las instalaciones y la obtención de las licencias requeridas en las diferentes fases del proyecto, tanto de los colegios profesionales como de las diferentes administraciones afectadas.
La aplicación de actuaciones dirigidas a mejorar la eficiencia energética es, sin duda, una vía encaminada a lograr la responsabilidad social de las empresas con el medioambiente. Un objetivo que va más allá del ahorro de costes al que también, sin duda, puede acceder el sector empresarial reduciendo su consumo energético.
