Hemos perdido el monedero y con él todas nuestras tarjetas bancarias. Y ahora ¿qué hacemos? Ante una eventualidad de este tipo, conocer de antemano qué pasos debemos seguir nos puede evitar situaciones un tanto molestas. Y es que, solemos tener claro lo que debemos hacer cuando extraviamos el documento de identidad, pero no siempre conocemos cómo proceder cuando lo que se nos pierde es la tarjeta de crédito o débito.
Que las tarjetas son un medio de pago imprescindibles en nuestro día a día ya nadie lo pone en duda. Además de poder pagar nuestras compras, evitando tener que llevar dinero encima, nos permiten retirar efectivo en los cajeros automáticos, recargar el móvil o conocer al detalle todas nuestros movimientos, ayudándonos, por tanto, a planificar mejor nuestros gastos.
Ahora bien, dependiendo de si nos han robado nuestra tarjeta o de si la hemos olvidado en casa, debemos proceder de diferente manera.
- Olvidar la tarjeta en casa
Seguro que alguna vez te has enfrentado a una situación similar a esta: has utilizado tu tarjeta para hacer una compra online, no la guardaste en el lugar habitual y ahora no recuerdas dónde la has dejado. ¿Sabías que en este caso puedes acceder desde tu móvil a la Banca Digital y “apagar” la tarjeta para así evitar contratiempos y ganar en tranquilidad?
¿Qué significa “apagar” la tarjeta? Esta es una opción que dan algunas entidades y, gracias a la cual, la tarjeta va a quedar bloqueada de inmediato y no permitirá realizar ninguna operación (ni compras ni retiradas de efectivo), pero con la ventaja de que no está anulada. Esto supone que una vez que la recuperemos podemos volver a “encenderla” de nuevo desde nuestra Banca Digital y seguir utilizándola con total normalidad.
La ventaja de esta opción es que es el cliente quien la gestiona en todo momento desde su Banca Digital y, por lo tanto, en caso de hallarla, nos ahorramos los trámites que conlleva tener que volver a solicitar una nueva tarjeta, ir a la oficina, etc.
- Pérdida o robo de la tarjeta
En el caso de que estemos completamente seguros de que hemos extraviado nuestra tarjeta o hemos sido víctimas de un hurto o robo, lo primero que debemos hacer es anular la tarjeta. En este caso tendremos que ponernos en contacto con nuestra entidad financiera, a través de la Banca Digital, llamando al servicio de atención al cliente o acudiendo a nuestra oficina bancaria. Asimismo, es necesario denunciar el delito ante la autoridad pertinente. La vía más rápida, sin duda, es la Banca digital desde la cual podemos no sólo anular nuestra tarjeta, sino también vez solicitar un duplicado.
¿Y si pierdo mi tarjeta en el extranjero?
Si estamos en el extranjero, deberemos seguir la misma operativa que en los casos anteriores para que nadie pueda hacer uso de nuestra tarjeta. Ahora bien, tenemos que tener en cuenta algunos aspectos adicionales ya que, aunque solicitemos una nueva tarjeta no vamos a recibirla hasta que estemos de vuelta, con la inconveniencia de que podemos necesitar el dinero durante nuestro viaje. En este caso, existe una serie de prestaciones asociadas a nuestras tarjetas bancarias:
- Servicios adicionales: algunas tarjetas poseen un servicio de liquidez de emergencia en el caso de robo o extravío de la tarjeta en el extranjero. Sólo con ponernos en contacto con el servicio de atención al cliente de nuestra entidad, nos enviarán el dinero donde solicitemos.
- Tarjetas enroladas en el móvil: En el caso de que dispongamos de una o varias tarjetas bancarias una buena opción es tenerlas enroladas en nuestro dispositivo móvil siempre que disponga de tecnología NFC. De esta forma si nos roban una de las tarjetas físicas, siempre podremos seguir utilizando el resto con nuestro Smartphone, con todas las garantías de seguridad que ofrece el pago móvil.
Aunque perder nuestra tarjeta bancaria nos puede causar diversos perjuicios, saber cómo actuar con rapidez nos permitirá minimizar los efectos. Asimismo, tener acceso a la banca digital de nuestra entidad bancaria es una medida que nos ayudará en este engorroso trámite.