El endeudamiento de la economía española puede examinarse a través de las Cuentas Financieras de la Economía Española que publica periódicamente el Banco de España. Esta estadística permite conocer las posiciones financieras de los distintos sectores de la economía española y entre esta y el resto del mundo. Os proponemos conocer a continuación, con los datos cerrados ya de 2019, cómo está estructurado el endeudamiento de la economía española.
En cualquier caso, conviene señalar que las cifras recogidas en este Blog pueden sufrir variaciones significativas como consecuencia de las nuevas necesidades de financiación que va a ocasionar el impacto económico del COVID-19, con cambios tanto en los volúmenes de endeudamiento como en la estructura del mismo.
¿Cuáles son las necesidades de financiación de la economía española?
En términos agregados netos, considerando la diferencia entre lo que debemos a otras economías y lo que nos deben, la economía española presenta un saldo deudor de 923.524 millones de euros en 2019 (sin incluir oro monetario y Derechos Especiales de Giro), en otras palabras, el saldo neto de lo que la economía española necesita del resto del mundo para financiarse. Esta cifra representa en torno al 74,2% del PIB corriente nacional, peso que se ha reducido unos 22 puntos porcentuales desde el máximo alcanzado en 2014, aunque todavía duplica el porcentaje que representaba en 2000 (35,4%).
Si consideramos la posición financiera de los distintos sectores institucionales de la economía observamos que las empresas, las instituciones financieras y las administraciones públicas tienen un saldo neto deudor, es decir, tienen que financiarse, mientras que los hogares y el resto del mundo tienen un saldo neto acreedor, es decir, financian a los otros sectores institucionales.
¿Cuál es la deuda de los sectores no financieros?
La descripción de la posición financiera neta nos aclara tanto si la economía española como los distintos sectores institucionales que la componen tienen necesidad o capacidad de financiación pero no ofrece información sobre el verdadero endeudamiento que soportan los sectores no financieros de la economía española ni quienes aportan los recursos financieros requeridos. En concreto, el endeudamiento de los sectores no financieros asciende a 3,512 billones de euros en el cuarto trimestre de 2019, lo que supone 2,8 veces el PIB español, si bien muestra una reducción respecto a los niveles máximos alcanzados en el segundo trimestre de 2014 (3,3 veces el PIB). Del endeudamiento señalado, 1,358 billones se concreta en valores representativos de deuda (37,7% del endeudamiento total) y 2,154 billones en préstamos (61,3%).
Distinguiendo por sectores institucionales, casi la mitad del endeudamiento se localiza en las administraciones públicas (1,644 billones de euros), un 33% en las sociedades no financieras (1,160 billones) y el 20% restante en los hogares (0,709 billones). En relación con el PIB, la deuda de las administraciones públicas representa el 132%, habiendo alcanzado el máximo en el cuatro trimestre de 2014 (157%), la de las sociedades no financieras supone el 93% y la de los hogares el 57% (máximos en el segundo trimestre de 2010; 141% y 86%, respectivamente).
¿Quién nos presta o financia?
También resulta interesante conocer quién nos facilita la financiación. En concreto, el mayor prestamista de la economía española es el sector de las instituciones financieras (1,917 billones de euros en el tercer trimestre de 2019) con casi el 54,6% del endeudamiento total. Le sigue el sector resto del mundo (1,041 billones; 29,6%) y a cierta distancia las administraciones públicas (0,297 billones; 8,4%) y las sociedades no financieras y hogares (0,257 billones; 7,3%). En relación con el PIB, las instituciones financieras han prestado por un importe que representa en torno al 154% del PIB, peso que desciende hasta el 83,6% en la que proviene del resto del mundo, constatándose una reducción de esta ratio en las instituciones financieras, 28 puntos porcentuales menos desde el cuarto trimestre de 2007, y un incremento de la ratio del prestamista resto del mundo, que casi se duplica desde esa fecha.
En definitiva, la economía española necesita que otras economías del resto del mundo la financien y aunque el peso respecto al PIB de estas necesidades de financiación se ha reducido en el último quinquenio sigue siendo muy elevado. Además, el endeudamiento de los sectores no financieros de la economía española representa casi tres veces el PIB nacional, aportando las instituciones financieras algo más de la mitad de estos recursos. En cualquier caso, hay que señalar que la crisis del COVID-19 supondrá un incremento notable de las necesidades de financiación de la economía española en los meses venideros.