La mayoría de los ciudadanos hemos tenido o tendremos en alguna ocasión sospechas sobre el aspecto de algún billete recibido. En el momento en que nos lo entregan, ante la duda de que nos estén dando un billete falso, estudiarlo detenidamente o pedir que nos lo cambien son las opciones más recomendables.
Si bien no es posible computar la cifra de billetes falsos en circulación en un determinado momento, sí que tenemos el dato de las cantidades que se han estado retirando en los últimos años en la zona Euro, y que van desde los 885 mil billetes del año 2015 a los 559 mil del año 2019 y los 376 mil de 2022. Se observa una tendencia a la baja continuada y sostenida año a año, a pesar de que en 2022 el número de billetes falsos retirados se ha incrementado un 8,4% respecto a 2021 algo que, según el Banco Central Europeo (BCE), se debe al reflejo de la recuperación de la actividad económica en 2022. Los billetes retirados de 20€ y 50€ son los que más proliferan, pues suponen en torno al 60% del total.
Aunque puede parecer un número elevado, el Banco Central Europeo recalca periódicamente que la probabilidad de recibir un billete fraudulento es muy baja, más bien remota, ya que el número de falsificaciones respecto al de billetes auténticos en circulación sigue siendo muy reducido. Según información facilitada por este mismo organismo supranacional, en 2022 se retiraron 13 billetes falsos por cada millón de billetes auténticos en circulación. Esta cifra es la segunda más baja desde la introducción del euro (la más baja fue en 2021) ..
Qué mirar para detectar un billete falso
Pese a que en el mercado existen gran variedad de dispositivos para detectar los billetes falsos, tales como rotuladores, máquinas de luz ultravioleta, aplicaciones móviles, etc… el método recomendado por el Banco Central Europeo y el Banco de España es el llamado “toque, mire y gire”. Un método simple y fiable pues es posible reconocer un billete falso con tan solo prestar un poco de atención y sin necesidad de recurrir a equipos especiales. Consiste en comparar el billete sospechoso con uno auténtico, el cual ha sido fabricado con una tecnología de impresión muy sofisticada.
- Tocar el billete. El auténtico tiene un tacto inconfundible, firme y resistente. En los bordes izquierdo y derecho posee una serie de líneas cortas en relieve (especialmente destinado para las personas sin visión). La cifra grande que indica el valor, así como las letras, también se aprecian en relieve.
- Mirar el billete. Al trasluz podemos observar gran variedad de elementos de seguridad reconocibles a la vista. Los más relevantes son:
Marca de agua. En ambos lados del billete se aprecia una imagen difusa que muestra un retrato de Europa, una ventana y el valor del billete.
Hilo de seguridad. Se trata de una banda oscura embebida en el papel, en donde se puede leer la cifra del valor del billete y el símbolo del Euro.
Ventana con retrato. Situada en la parte superior de la banda metálica, se vuelve transparente y muestra el retrato de Europa por ambos lados.
- Girar el billete. Dentro de la ventana con retrato, aparecen líneas multicolor alrededor del símbolo de Euro grande. En su reverso distinguimos números multicolor que indican el valor del billete. El número de color verde esmeralda situado en la esquina inferior del billete cambia de color y produce un reflejo metálico que se desplaza verticalmente.
Las siete denominaciones de billetes Euros comparten la mayoría de los elementos de seguridad, aunque no todos. Para cerciorarse, es recomendable comprobar varios de ellos.
¿Qué hago si sospecho que es falso?
Si sospechamos que el billete es ilegítimo, no debemos aceptarlo, pues carece de valor y no recibiremos ninguna contrapartida aunque se entregue a las autoridades.
Si lo hemos aceptado, aun siendo de buena fe, debemos tener en cuenta que si posteriormente sospechamos o descubrimos que el billete es falso, usarlo para pagar está tipificado como delito en el Código Penal. Si la cantidad excede de 400€ se considera delito grave. Antes de la reforma del Código Penal en el año 2015, la expedición de moneda falsa se sancionaba como una falta.
Por tanto, si presumimos que hemos sido víctimas de una falsificación, deberemos avisar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o llevarlo a una sucursal bancaria o a las oficinas del Banco de España para que sea comprobado.
Si optamos por llevarlo a una entidad financiera, tendremos la garantía de que entre sus tareas está la de verificar y detectar los billetes falsos y para ello cuentan con equipos especializados, los cuales son sometidos a prueba periódicamente por parte de los Bancos Centrales de cada país.
Si el billete es falso, ¿qué ocurre con él?
En caso de resultar falso, según lo dispuesto en el Reglamento 1338/2001/CE, “las entidades de crédito tienen la obligación de retirar de la circulación todos los billetes y monedas en euros recibidos cuya falsedad les conste o puedan suponer fundadamente. Así mismo, deben entregarlos sin demora al Banco de España”. El incumplimiento de esta obligación, se considera una infracción administrativa grave.
Junto al envío del billete se acompaña un formulario en el que el empleado de la sucursal nos pedirá que rellenemos nuestros datos personales y el número de cuenta bancaria para que nos puedan realizar el ingreso del importe del billete en caso de que tras su peritaje en el Banco de España, se compruebe que es de curso legal. Si lo recordamos, es importante anotar también donde o quien nos lo entregó pues esta información puede ser de mucha utilidad para la Policía a la hora de intentar localizar a los falsificadores.
Es el Departamento de Emisión y Caja del Banco de España el encargado de la detección, recogida y análisis de los datos técnicos y estadísticos relativos a los billetes falsos denominados en euros, para su posterior comunicación al Banco Central Europeo, el cual a través del Centro de Análisis de Falsificaciones (CAF) lleva a cabo un exhaustivo seguimiento de las nuevas técnicas de impresión y reproducción de imágenes, así como de las falsificaciones detectadas. En última instancia son comunicadas a las Fuerzas de Seguridad y otros entes que trabajan de manera conjunta en la lucha contra la falsificación.